El repertorio lírico polifónico español disfrutó de una vitalidad extraordinaria en la España del Siglo de Oro. Esta es precisamente la época de los poetas renacentistas más ilustres del siglo XVI —Garcilaso de la Vega, Juan Boscán, Luis de Vivero, Jorge de Montemayor, Garci Sánchez de Badajoz, Comendador Escrivá, Jorque Manrique o Lope de Vega, entre otros— cuyos textos fueron puestos en polifonía por las más grandes figuras de la composición vocal española de aquella época. Esta comunión artística entre poesía y música del Siglo de Oro español es la esencia rectora de esta grabación, El sentir de mi sentido, que presenta una selección muy representativa de la vida musical profana española de mediados del siglo XVI.
Esta época de esplendor cultural plena de excelencia artística —entre la literatura y la música renacentista— dio lugar a la creación de un repertorio lírico español misceláneo dentro del complejo paisaje sonoro del mundo ibérico peninsular. Todo parece indicar que la recepción del madrigal italiano en el contexto musical hispano estuvo limitada al ámbito cortesano y nobiliario; sin embargo, es probable que su consumo fuera mayor de lo que reflejan las fuentes conservadas de la temprana Edad Moderna. En este sentido, debe ponerse en valor la vanguardia que disfrutó el género madrigalesco en la España renacentista por medio de un grupo destacado de compositores que dedicaron una parte destacada de su talento compositivo a escribir obras profanas sobre textos de temática amorosa según al estilo del madrigal temprano o clásico italiano
No existe una respuesta simple, aunque hoy se hace difícil explicar la escasa atención mostrada sobre este extraordinario patrimonio cultural y su posición privilegiada dentro del canon de la música del Renacimiento hispano. La recuperación histórica de algunas de estas obras, así como la revisión actualizada de otras piezas bien conocidas, hacen de la polifonía conservada en esta magnífica antología nobiliaria, un testimonio vivo de la música profana española renacentista. En definitiva, la lírica polifónica española renacentista salvaguarda un valioso repertorio amoroso para el deleite moderno de su polifonía, pero inseparable de una lectura atenta de su poesía. Hic est chorvs.
PROGRAMA
primera parte
Pedro Guerrero (Garcilaso de la Vega)
¡Oh, más dura que mármol a mis quexas!
Fray Juan Díaz (Garcilaso de la Vega)
¡Quién me dixera, Elisa, vida mía!
Fco. Guerrero (Lope de Vega)
Si tus penas no pruevo
Anónimo
Yntolerable rrayo
Ginés de Morata
Ninpha gentil
Gines de Morata (Jorge de Montemayor)
Ojos que ya no véis
Gines de Morata (Jorge de Montemayor)
Aquí me declaró
segunda parte
Antonio Cebrián (Garci Sánchez de Badajoz)
Lágrimas de mi consuelo
Anónimo (atribuido a Lope de Vega)
Hermosa Cathalina
Rodrigo de Cevallos (Garcilaso de la Vega)
¡Quán bienaventurado!
J. Vázquez (Luís de Vivero)
Si no os uviera mirado
Cristóbal de Morales (Boscán)
Si no os uviera mirado
J. Vázquez (Garci Sánchez de Badajoz)
¡O dulce contemplación!
J. Vázquez (Comendador Escrivá)
¿Qué sentís, corazón mío?
Rodrigo de Cevallos (Barrionuevo)
Ojos hermosos
Antonio Cebrián
Socórreme pastora